miércoles, 14 de marzo de 2012

La Reconciliación

Aquello que está enfrentado y debe ser reconocido en un plano superior como del mismo valor, surge cada vez con mas claridad en los movimientos de las constelaciones.

El conocimiento de que aquello que está enfrentado debe ser reconciliado entre sí se inicia ya con Freud. Él se dio cuenta de que aquello que está reprimido debe ser aceptado como del mismo valor. Esto significa que alguien crece por encima de su anterior conciencia. Si lo consigue, si una persona puede reconocer que su sombra tiene la misma importancia que su luz, de modo que ambas, luz y sombra, sean aceptadas de la misma manera, la persona crece. La persona logra ahora otra fuerza.

Lo mismo podemos verlo en la familia. También la familia tiene algunos miembros a los que llama buenos, y algunos a los que llama malos. Algunos son exitosos y otros son fracasados. Algunos son virtuosos y otros son delincuentes. Los así llamados malos o fracasados o delincuentes serán excluidos. 

Tan pronto como ellos son excluidos, aquel que los excluyó (o el grupo que los excluyó) pierde algo fundamental. Ellos se achicarán. En las Constelaciones Familiares vemos que los excluidos deben ser integrados. Tan pronto como ellos son reincorporados a la familia la persona se siente completa. Ella será más amplia, tendrá más fuerza, será más suave, tendrá mayor capacidad para la reconciliación. 





Bert Hellinger